El Palamó pide la secesión para frenar un ‘ladrillazo’

Han buscado asesoramiento jurídico en la Universidad, para concretar los pasos legales necesarios, y el apoyo político del Bloc.

Su aspiración ha enfrentado a los residentes. Uno de los promotores, Francisco Góngora, denuncia que «empresarios como Ortiz y Arias, relacionados con (el alcalde) Alperi, vayan a construir miles de viviendas en la zona». El número exacto estaría en función de la redacción del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), pero la mayoría de terrenos están ya vendidos. La independencia echaría a perder estos proyectos, porque El Palamó redactaría su propio plan.

Mari Carmen Ibáñez, representante del Bloc y partidaria de crear una entidad local menor, fórmula con más autonomía, pero no independiente, cree necesario un «apoyo mayoritario y un debate con expertos», pero denuncia «que la asociación vecinal, en manos del PP, quisiera impedir poner una mesa para poder recogerlas». Para ella, «necesitamos organizar nuestro presupuesto para que no sigamos siendo el culo del mundo».

Ulpiano Colás, presidente vecinal, opina que «la separación la promueven cuatro vividores». Para él, «gracias al PP hay alumbrado, biblioteca y asfalto en las calles».

Tienen un médico para todos

Los palamoneros sufren múltiples carencias sobre las infraestructuras de este barrio. Se quejan de que no hay polideportivo ni instituto, que el colegio público está «medio vacío» porque se favorece al centro privado y que la limpieza urbana es «pésima», según Mari Carmen Ibáñez. Además, no hay personal de servicios sociales y solamente un médico para todos los habitantes, «que no da abasto»; un cartero, «que no puede con todo», y «un autobús obsoleto». Y, para colmo, cuando se producen altercados, la Policía Local tarda «media hora» en llegar.